Zigor Corporación, ubicada en Vitoria, sigue con un crecimiento imparable. La empresa, cuyas innovadoras tecnologías garantizan la estabilidad en el suministro energético, prevé duplicar sus ventas este año y es un proveedor de alta calidad de multinacionales como Iberdrola y Schneider. La compañía ha recibido una ayuda del programa de ciberseguridad industrial del Grupo SPRI.
La firma nace en 1995 por el interés en buscar aplicaciones y usos del almacenamiento de energía eléctrica en baterías. “Surge de Juan Celaya, el dueño de Cegasa, y Saft, una empresa francesa fabricante de baterías. El primer producto son los rectificadores-cargadores de batería para las subestaciones eléctricas, que son sistemas que dan alimentación a equipos auxiliares y de control y proporcionan una alimentación segura en corriente continua cuando tienen caídas de red, operaciones de mantenimiento, etc.”, explica Iñigo Segura, consejero delegado de Zigor Corporación.
La joint venture entre las dos empresas duró unos años y fue entonces cuando Juan Celaya decidió seguir con la aventura empresarial en solitario “y ahí surge Zigor como empresa fabricante y comercializadora de productos. Y ha seguido trabajando en usos de sistemas de almacenamiento en baterías desde entonces”.
La crisis económica de 2008 y la específica para el sector, con la reducción de las primas energéticas, dejó en una situación complicada a la empresa, que coincidió además con una inversión fuerte de expansión internacional. “La entrada de un nuevo socio en 2015, ZGR International, permitió a la empresa salir de ese bache”. Con el fallecimiento de Juan Celaya en 2016, ZGR International adquiere las acciones de los herederos y se hace con la mayoría de la propiedad. “Se produce el gran cambio, que es cuando me incorporo a la empresa, con una fase de tres -cuatro años de reestructuración de procesos, de cultura de la dirección y revisión de la gama de producto y estrategia de compañía”.
Todo ello fructifica en 2020 con un nuevo catálogo renovado de productos y transformación de cultura y procesos internos, señala Iñigo Segura. “La pandemia paraliza ciertas cosas, pero nos permite crecer y en 2021 aumentamos un 20% en ventas, un 60% el Ebidta y un 300-400% el volumen de ofertas a clientes”.
Zigor Corporación trabaja en tres sectores. El primero es la energía, centrados en fotovoltaica y en todas las posibles aplicaciones, desde plantas de generación, sistemas de autoconsumo industrial y residencial hasta microrredes y almacenamiento para apoyo a la generación y servicios de regulación.
El segundo son las redes eléctricas, con clientes de grandes eléctricas, y ofreciendo una amplia gama de fuentes de alimentación con baterías en corriente continua para garantizar el suministro en las subestaciones. Además, ha desarrollado e instalado sistemas de almacenamiento, para servicios de regulación de la red de distribución eléctrica, una nueva aplicación que está siendo muy importante para las eléctricas, con el uso del litio como una nueva tecnología de almacenamiento más eficiente.
Y el tercer sector es la industria, con el objetivo de dotar de “una electricidad de alta calidad exenta de las perturbaciones e interrupciones que en ocasiones aparecen en la red, no sólo a través de sistemas de alimentación ininterrumpida convencionales (UPS) para oficinas y residencias sino a través de sistemas especiales para grandes consumidores industriales (SEPEC)”.
Modelo propio
Zigor ha ideado un sistema propio para solucionar los denominados huecos de tensión (caídas de tensión de corta duración) en la red eléctrica. “Son reguladores dinámicos de tensión, que no tienen batería, que es lo que nos ha permitido lograr el contrato de suministro global con Schneider”. Un contrato que ha sido una de las principales fuentes de incremento de las ventas durante el pasado año.
La compañía se vanagloria de sus clientes de primer nivel, como Mercedes, Renault, farmacéuticas como Abbott o centros logísticos. “Somos el único proveedor de Mercadona de sistemas de alimentación ininterrumpida industriales. Tener estos clientes te obliga a ofrecer calidad y robustez ya que nuestros equipos dan soporte a procesos críticos. Cuando falla la red, si fallamos nosotros la empresa se para”.
El pasado año alcanzó los 10 millones de facturación, un 20% de incremento y este año espera duplicar la facturación, gracias fundamentalmente al importante crecimiento del área de Energía, y llegar a los 20 millones. La plantilla está conformada por 86 personas. Las inversiones rondan el millón de euros y más de un 8% de la cifra de negocio se dedica a la I+D+I.
La ayuda del Grupo SPRI del programa de ciberseguridad industrial ha sido para un proyecto que refuerce la protección tanto en la compañía como en sus productos. “Y es que nuestros clientes ya nos están exigiendo ciertos niveles de ciberseguridad”. El proyecto está en desarrollo, “con el 39% de los objetivos cumplidos y la idea de finalizarlo este año. El objetivo es certificarnos con la nueva ISO vinculada a sistemas de ciberseguridad. La ayuda de SPRI ha sido fundamental”.
Iñigo Segura destaca que el área de compras “ha sido capaz de no fallar en ninguna entrega, y eso con un gran crecimiento de ventas y graves roturas y retrasos en las cadenas de suministro. Y, en un contexto de gran crecimiento de los costes de materiales, los hemos reducido en un 0,4%”.
Los retos pasan por que “ómicron termine y se solucionen los problemas de la cadena de suministro. La idea es recuperar la normalidad en verano e impulsar las ventas en el área de energía. En el desarrollo de producto, el lanzamiento de un nuevo inversor solar central (como se denomina al convertidor de la energía), un nuevo sistema para almacenamiento, nuevas fuentes de alimentación para Iberdrola y convertidores DC/DC para almacenamiento y para la generación de hidrógeno renovable”.
El otro objetivo es la mejora de la productividad y la inversión en capacidad de I+D.
Para pymes, para diversificar mercados, becas en el extranjero, licitaciones internacionales, subvenciones a fondo perdido para afianzar la exportación, ayudas para implantaciones o formación específica en internacionalización.
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