El Cluster financiero e inversor de Euskadi cuenta con más de 50 socios en apenas unos meses de andadura. ¿A qué cree que se debe este éxito?
Este rápido crecimiento refleja una combinación de factores clave que distinguen a nuestro ecosistema financiero e inversor. En primer lugar, estaría, sin duda, el compromiso con el territorio. La visión compartida de trabajar juntos para asegurar la presencia de Euskadi en la economía del futuro.
El éxito también se apoya en la sólida tradición empresarial e inversora de la región, donde la histórica relación de confianza entre el sector financiero y el tejido industrial ha creado una base de colaboración única. Además, Euskadi, gracias a su tamaño, cuenta con un ecosistema que favorece la accesibilidad y la agilidad en la toma de decisiones, favoreciendo una interacción más cercana y efectiva entre actores clave, tanto públicos como privados.
Por último, creo que la apuesta decidida de BASQUEFIK por la colaboración, la innovación, la sostenibilidad y la atracción de talento e inversión ha conectado con las aspiraciones de nuestros socios; compartimos un propósito común.
¿Qué papel va a tener clúster dentro del ecosistema financiero e inversor en Euskadi?
Tenemos como objetivo transformar el ecosistema financiero e inversor de la economía vasca y conectar con las necesidades del tejido empresarial, para mantener y atraer centros de decisión y generar una economía más sostenible que incremente la competitividad y el bienestar del territorio.
Euskadi ha sido históricamente un territorio con una sólida tradición financiera y empresarial reforzada por herramientas singulares como el concierto económico, una fuerte cultura financiera y un sector propio, profesional y solvente. Ahora queremos dar un paso más, consolidando Euskadi como un referente en la atracción de inversión y talento, y dinamizando la conexión entre el ecosistema financiero e inversor y el tejido económico local.
Nuestra misión es transformar retos en oportunidades y consolidar un sector financiero e inversor que sea una palanca para el progreso económico y social de Euskadi.
Creemos que BASQUEFIK aportará valor a Euskadi porque contribuirá a impulsar el desarrollo económico del territorio, atraer inversión estratégica, promover la innovación y el talento y dinamizar la cooperación publico privada.
¿Cuáles son los principales objetivos estratégicos del clúster para los próximos años?
A grandes rasgos, podemos decir que trabajamos para mejorar la competitividad del sector financiero e inversor, conectando con las necesidades del tejido empresarial de Euskadi, para mantener y atraer centros de decisión y facilitar que la economía local se fortalezca.
Aunque estamos inmersos en nuestro primer ejercicio de reflexión estratégica, hemos identificado varias grandes líneas de actuación que marcarán nuestra hoja de ruta:
¿Qué tipo de actores forman parte de este clúster y qué papel tendrán dentro de la asociación?
El clúster está integrado por una amplia diversidad de actores tanto públicos como privados, que incluye instituciones financieras, family offices, centros tecnológicos, universidades, consultoras tecnológicas, asesores, y entidades públicas. Esta combinación de miembros nos permite abordar los desafíos del sector financiero desde una perspectiva integral y complementaria.
Cada uno de estos actores desempeña un rol esencial dentro de la asociación. Las instituciones financieras e inversores aportan un profundo conocimiento del sector y una experiencia clave para impulsar la transformación. Las entidades públicas, representadas por el Grupo SPRI a través de la Sociedad de Capital Riesgo de Euskadi y el Instituto Vasco de Finanzas, ofrecen una visión estratégica que asegura la alineación de los objetivos del clúster con las políticas públicas y el desarrollo económico de Euskadi. Además, los centros tecnológicos, universidades, consultoras y asesores contribuyen con su capacidad innovadora y especialización técnica.
Somos conscientes de que el contexto actual plantea desafíos complejos que exigen una coordinación más efectiva entre los actores económicos. El compromiso y la participación activa de los socios es, sin duda, indispensable para avanzar y garantizar la consecución de los objetivos del clúster.
¿Cuáles son los mayores desafíos a los que se enfrenta el ecosistema financiero e inversor en Euskadi hoy en día?
Comparado con otros entornos que he conocido, al ecosistema financiero e inversor de Euskadi se le presentan varios retos. Uno de los principales es el tamaño de la región, que, aunque facilita la cercanía entre actores, también limita la especialización y la variedad de soluciones disponibles. En este sentido, destacaría la relativamente baja especialización en instrumentos financieros innovadores y la escasa presencia de un sector Fintech, que representa una oportunidad de crecimiento aún por desarrollar.
Además, existe una limitada integración en los ecosistemas financieros internacionales, lo que dificulta la conexión con mercados globales. A esto se suma cierta desconexión entre el tejido empresarial y la industria financiera; por un lado, el sector financiero local no siempre logra adaptarse a las necesidades actuales de la industria, y, por otro, la industria tradicional de Euskadi no está habituada a explorar enfoques alternativos para cubrir sus necesidades financieras.
Esta situación no solo limita el desarrollo del ecosistema, sino que también puede favorecer el desarraigo empresarial y la pérdida de centros de decisión en el territorio. Abordar estos desafíos será esencial para asegurar que Euskadi pueda aprovechar al máximo su potencial competitivo en el futuro.
¿Qué oportunidades considera que existen para fortalecer aún más el ecosistema financiero en Euskadi?
Los retos que enfrentamos en Euskadi deben ser vistos como oportunidades para fortalecer nuestro ecosistema financiero e inversor, aprovechando nuestras fortalezas y trabajando de manera estratégica y coordinada.
El tamaño de Euskadi, aunque puede suponer un desafío en términos de especialización o alcance global, también presenta una oportunidad. Lejos de ser una limitación, nuestra escala territorial puede convertirse en una ventaja competitiva al facilitar la colaboración entre actores del ecosistema.
Esta característica debería ser aprovechada para superar los silos organizacionales y fomentar iniciativas conjuntas que generen impacto significativo. Con una coordinación adecuada, podemos lograr la masa crítica necesaria para fortalecer nuestra influencia en el panorama financiero nacional e internacional.
Además, las nuevas tecnologías nos ofrecen una oportunidad clara para potenciar las capacidades de los equipos/personas, la eficiencia y competitividad. Aunque nuestra población activa es pequeña, tiene potencial en términos de conocimiento y especialización, y es aquí donde debemos apalancarnos para generar un impacto significativo.
Otra área de oportunidad clave está en las tendencias globales como la inversión de impacto y el crecimiento del sector Fintech. Estas áreas no solo están redefiniendo el sector financiero a nivel mundial, sino que también representan un campo para la innovación y la atracción de talento e inversión en Euskadi. Debemos fomentar el interés en estas oportunidades de crecimiento y alinearlas con las tres transiciones clave: la tecnológica, la energética y medioambiental, y la social, generando así un impacto transversal en la economía y la sociedad
¿Qué le diría a las empresas y entidades que aún no forman parte del clúster o que estén valorando la posibilidad de unirse a él?
Creo que para nuestros socios formar parte de BASQUEFIK representa una oportunidad única de ser protagonistas en la transformación del sector financiero de Euskadi.
Ofrecemos un espacio de conexión y colaboración donde podrán compartir experiencias e intereses con otros actores clave del ecosistema, acceder a información estratégica sobre las tendencias y cambios del sector, participar en iniciativas y proyectos estratégicos para fomentar la competitividad, la innovación y la sostenibilidad y contribuir a atraer talento e inversión, fortaleciendo sus capacidades organizativas y su impacto en el territorio.
Formar parte del clúster significa integrarse en una red de colaboración donde confluyen actores clave del sector financiero e inversor, tecnológico, académico y empresarial. La fortaleza de BASQUEFIK reside en la diversidad y complementariedad de sus miembros; cada nueva incorporación enriquece nuestra capacidad de generar impacto transformador y alcanzar los objetivos del clúster.
Mirando al futuro, ¿cuál es su visión para el desarrollo del sector financiero en Euskadi durante los próximos 5-10 años?
En los próximos 10 años, imagino un sector financiero en Euskadi que sea un referente por su capacidad de combinar tradición y modernidad, destacando por su estrecha conexión con el tejido empresarial local y su compromiso con el territorio. Un ecosistema financiero e inversor abierto y eficiente, que aproveche la tecnología para impulsar la innovación y que sitúe la sostenibilidad en el centro de las decisiones.
Un sector financiero que no sólo responda a las necesidades actuales, sino que también sea capaz de evolucionar con rapidez en un mundo en constante cambio, manteniendo su identidad.
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