Juan de Miguel, CEO de Grupo Gestionet, fundador de la firma vasca pionera en gamificación sostiene que “si tu empresa solo replica, llega tarde”.
En el escenario actual de cambios tan vertiginosos y transformadores, la innovación ha adquirido mayor relevancia si cabe como mecanismo de supervivencia en el ámbito empresarial y para las organizaciones en general. Hay empresas que afrontan esta realidad con ventajas competitivas porque incorporaron la innovación a su razón de ser a principios de este siglo. Lo hicieron con una escucha activa constante para detectar necesidades y problemas. Es el caso de Grupo Gestionet, que en este 2021 celebra su 20 aniversario.
Desde sus instalaciones en el área empresarial Axpe de Erandio-Bizkaia, gestionada por Sprilur (Departamento de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente e integrada en el Grupo Spri), Gestionet desarrolla soluciones digitales innovadoras para multinacionales de España y América Latina. Ha sido pionera en el uso de la gamificación, término que hace referencia a la ludificación de herramientas profesionales para la consecución de objetivos con una experiencia usuaria más amigable. Igualmente, está especializada en simuladores empresariales, en soluciones para todo el ciclo de gestión del talento (selección de personal, on-boarding para la incorporación de nuevos profesionales a empresas, capacitación y desarrollo de competencias, comunicación…).
Grupo Gestionet acaba de lanzar una plataforma de formación por internet o e-learning de última generación (LXP, Learning Experience Patform). Asimismo, está centrada en el desarrollo de soluciones para atender los requerimientos de la conocida como economía verde. En este sentido, su departamento de I+D, reforzado por la incorporación de especialistas en productos tecnológicos para el desarrollo sostenible, la descarbonización y, en general, la lucha contra el cambio climático, está enfocado a innovar en este sector.
¿Cuál es la característica fundamental para llegar a tanto con tan pocas personas? Ahora mismo no superáis el medio centenar en la plantilla…
Creo que una de las claves principales es la involucración en los proyectos. La gente que trabaja aquí lo hace porque le gusta. Les motivan los tipos de proyectos que hacemos y son grandes profesionales que, además, quiero pensar y así me lo demuestran cada día, forman un equipo muy cohesionado.
¿Qué factores determinaron la elección del área empresarial Axpe en Erandio como sede de vuestra actual localización?
Hemos elegido el área empresarial de Axpe en Erandio porque lo consideramos estratégico por estar entre Bilbao, Getxo y cercano a Barakaldo. También el hecho de que esté el metro al lado es esencial para nuestro talento.
¿Cómo trabaja Grupo Gestionet la innovación?
La innovación es una necesidad, no es un lujo, forma parte de nuestro ADN. En un sector tan complejo y dinámico como es el tecnológico cualquier empresa que no se lo plantee de esa forma está condenada al fracaso.
Hoy en día sabemos perfectamente que lo que facturamos en la actualidad dentro de cuatro años probablemente no vaya a ser. Hay que pensar ahora en lo que vamos a ingresar o facturar dentro de cuatro años.
Eso hay que crearlo, hay que ver las tendencias, hay que ver la innovación aplicada, para cubrir necesidades concretas desde la creatividad. Estos son algunos de los elementos que nos hacen especiales.
Hablas de la innovación aplicada, ¿estáis también aplicándola en el seno de la propia empresa? Si es así, ¿de qué manera lo hacéis?
Nuestro core businessson las personas. Ahí está el talento, ahí reside nuestro valor diferencial. Invertir en el talento es invertir en la empresa y nuestro futuro. Queremos que las personas puedan aportar su creatividad y talento en aras del bien común del grupo empresarial.
Estamos desarrollando un programa de microinnovación donde los miembros del equipo pueden dedicar parte de su tiempo laboral a investigar y desarrollar elementos o procesos que pueden ser el germen o embrión de grandes innovaciones. Estas pueden surgir del talento individual para después convertirse en algo colectivo.
Destacáis en vuestra propuesta de valor las soluciones digitales innovadoras, ¿de qué manera las desarrolláis?
Aquí tenemos dos vías, una es desde el propio mercado. Tenemos contactos y somos proveedores de grandes empresas, muchas de ellas del IBEX. También en América Latina. Poder contactar y que estos clientes nos expresen sus necesidades también es un termómetro de qué va necesitando el mercado en cada sector. Eso nos sirve de fuente de inspiración para desarrollar no solo proyectos individuales, personalizados y exclusivos para esas empresas en concreto, sino que nos inspira para generar temas o tendencias sobre las que luego podemos desarrollar productos o prototipos que probamos en el mercado.
Si te dedicas solo a replicar lo que hacen las empresas, ya llegas tarde. Tienes que pensar en lo que el mercado va a necesitar en uno o dos años para, una vez haya llegado ese momento, tener la solución adecuada. En caso contrario siempre vas a ser el último.
“La sostenibilidad no tiene vuelta atrás, estamos desarrollando
soluciones digitales innovadoras para la economía verde”
Estáis celebrando vuestro 20 aniversario. ¿Qué significado tiene este hecho para ti, que eres fundador? ¿Qué supone que la empresa que un día ideaste haya llegado tan lejos?
Tiene diferentes lecturas. Como persona emprendedora, como ser humano, es un hito que me llena de orgullo. El camino no es fácil. Cualquier persona que haya emprendido o desarrollado un negocio lo sabe. Tienes que pasar por diversas vicisitudes. Ya es un éxito estar en activo en un sector tan dinámico. Estos 20 años son solo el principio.
Durante estos años hemos recopilado mucha información, conocimiento, un know how que es muy difícil lograr y ahora estamos en una perfecta simbiosis entre tecnología y conocimiento de las necesidades y de los productos y soluciones que se demandan para dar lo mejor de nosotros como empresa y como personas. Es un hito que queremos celebrar. Según nuestras investigaciones, somos la primera empresa en activo en el sector de la gamificación y desarrollo de serious games que vamos a cumplir este hito. No nos conformamos.
Lo importante es el presente y el futuro. El talento va a ser un elemento fundamental, el valor diferencial. Las máquinas van a a ser una commodity, algo a lo que se accede, sin más, el factor diferencial lo van a dar las personas. Trabajar e invertir en talento va a resultar clave.
“Invertir en el talento es invertir en la empresa y nuestro futuro”
Aunque dices que el pasado en realidad no tiene tanto peso como el presente y el futuro, en un vigésimo aniversario se echará la vista atrás y se verá también ese cambio que ha vivido la propia empresa. ¿Cómo comenzó? ¿Cómo fueron esos orígenes?
No comenzamos en un garaje, pero sí en un despachito muy pequeño. Nuestro objetivo principal en esos momentos y nuestro plan de negocio estaban orientados al desarrollo de simuladores empresariales. El público objetivo lo conformaban sobre todo universidades y escuelas de negocio. Nos íbamos a dedicar a los business games, simuladores que emulan el funcionamiento de una empresa y te ayudan a ir tomando decisiones. A veces en los planes de negocios hay desviaciones.
Ocurrió que tardamos 18 meses en hacer el simulador que preveíamos hacer en medio año. Sucedió porque nunca habíamos hecho ninguno antes, aunque teníamos experiencia en otras cosas. Aprovechamos el conocimiento que teníamos ya y que habíamos incorporado a profesionales del diseño, de la programación, creativos, para darnos cuenta de que había un nicho para financiar los simuladores, que era la gamificación. A raíz de eso abrimos una nueva línea de negocio en la empresa, manteniendo la simulación. Los primeros años todo fue muy artesanal, con un trato al cliente muy exquisito, muy cercano, muy personalizado.
¿Ha cambiado esa forma de abordar la experiencia de cliente?
No, no. Eso es algo que no hemos querido perder. Nos hemos esforzado en este sentido durante todos estos años. Ha sido una fortaleza para nuestra empresa y una de las razones por las que estamos aquí, con tanta energía y salud para afrontar el futuro.
En aquellos tiempos éramos una empresa pionera y los clientes nos venían a buscar. Luego, coincidiendo con la crisis financiera, vimos que teníamos que redefinir algunos aspectos. Teníamos que abrirnos también al ámbito estatal. Vimos que había necesidades de estos productos y comenzamos a trabajar con grandes empresas, muchas de ellas del IBEX. Operaban en el sector de la banca, en el energético o el retail, fundamentalmente. A partir de ahí vimos que teníamos mucho que aportar en el ámbito internacional y que había oportunidad de mercado, por lo que una vez superada la crisis nos vimos con energías y músculo financiero suficientes para empezar una etapa de internacionalización.
“Los ODS no son solo para las grandes empresas, las demás tenemos que aportar
nuestro granito de arena y ser agentes importantes en nuestro entorno”
¿De qué forma acometisteis ese salto hacia otros países?
Empezamos en Colombia y continuamos en Perú abriendo dos filiales. Conseguimos trabajar para empresas muy grandes, para multinacionales. Son mercados muy complicados y exigentes, compites con marcas de todos los países que tratan de introducir sus productos en Latam. Tener éxito ahí permite saber qué grado de competitividad tienes. A pesar de que la experiencia de abrir mercado allí ha sido dura y difícil, llevamos siete años y tenemos la intención de ampliarlos.
Eso quería preguntarte precisamente, ¿cómo veis el futuro para Grupo Gestionet? ¿Qué visión tienes como socio fundador? ¿Hacia dónde vais a dirigir el trabajo en este tiempo?
Hay varias líneas que son fundamentales. Una es trabajar en el desarrollo de herramientas que diagnostiquen y que también potencien las competencias y habilidades de las personas en el ámbito profesional. Para nosotros es un área que va a seguir creciendo. Las empresas cada vez están más concienciadas en este tema. La crisis de la pandemia va a crear también una necesidad en las instituciones para fortalecer y empoderar a las personas para poder lograr mejorar su trabajo.
Desde nuestros valores estamos muy alineados con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la ONU, no son solo para las grandes empresas, las demás también tenemos que aportar nuestro granito de arena y ser agentes importantes en nuestro entorno. Y hay un área que queremos reforzar que es la economía verde. La hemos trabajado prácticamente desde siempre, sobre todo en la difusión, pero ahora la queremos visibilizar, poner en valor y estructurar de tal manera que ofrezcamos una oferta de productos y soluciones de máxima calidad que ayude al mercado y que lleve ese conocimiento que hemos adquirido. La sostenibilidad es fundamental, no hay vuelta atrás. Las instituciones han dado un paso de gigante en ese aspecto, al menos de compromiso público, y detrás nos toca a las empresas y los ciudadanos.
Para pymes, para diversificar mercados, becas en el extranjero, licitaciones internacionales, subvenciones a fondo perdido para afianzar la exportación, ayudas para implantaciones o formación específica en internacionalización.
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