En 2011, la marca Ecolaundry nació y abrió sus primeras lavanderías en zonas estratégicas de diferentes núcleos urbanos, tras observar la necesidad de dotar a las lavanderías autoservicio existentes de una imagen, servicio y limpieza de calidad. Ahora, tras más de 10 años de trayectoria, se ha asentado en los valores del cuidado del medio ambiente.
Para atender a su principal objetivo y valor, los productos químicos que se dispensan automáticamente, como los suavizantes, detergentes y desinfectantes, son ecológicos y efectivos tanto en agua fría como en caliente. Además, ha ajustado los consumos de agua y energía en lavadoras y secadoras para ceñirse a su propósito y conseguir la mayor calidad de lavado y secado.
En su apuesta por la digitalización de los procesos, tanto para usuarios como para sus franquiciados, Ecolaundry ha desarrollado sistemas que, “independientemente de tu nivel de competencias tecnológicas, seas capaz de gestionar en remoto toda la domótica de la lavandería de manera intuitiva”, aclara el fundador de Ecolaundry, Ramón González. Porque “queremos que cualquiera sea capaz de hacer su colada, aunque no haya puesto una lavadora hasta ahora”.
La empresa, que fue pionera en abrir lavanderías en centros comerciales o en implementar un sistema de pago con tarjeta de crédito, poco a poco, a través de su apuesta por la digitalización y la innovación, ha conseguido “mejorar la experiencia del cliente, dotando a las tiendas de mayor tecnología y prestaciones”, apunta el fundador de Ecolaundry. Un ejemplo de ellos es que además de pagar con el smartphone, también se pueden gestionar las coladas mediante una “sencilla e intuitiva” aplicación.
La empresa vizcaína, además de tener lavanderías por todo el Estado, está presente en Marruecos y Chile, y tiene ya avanzada la entrada en México y Colombia y en Europa, en Francia y Bulgaria. Tras asentar sus bases, esta nueva fase de internacionalización, la de llevar a otros mercados “lo que sabemos que funciona para nuestros clientes y usuarios”, Ramón González la entiende como “un paso natural del momento”.
Su objetivo, ahora, es continuar aumentando sus estándares de calidad y ser la primera opción de los clientes cuando necesiten acudir a una lavandería autoservicio. De cara al futuro, se centra en ofrecer cada vez una mejor experiencia de usuario. Por eso, ha lanzado dos líneas de negocio nuevas que han tenido “una buena acogida”, según González. La primera es Ecolaundry Box: un formato de lavandería modular accesible y sostenible creada desde el concepto de reutilización y reciclaje, que ofrece las mismas prestaciones que una lavandería autoservicio habitual y cambia de ubicación fácilmente. Y la otra es Ecolaundry Pet: un autolavado ecológico para animales, con productos de calidad y respetuosos con el medio ambiente, que permite un aseo cómodo tanto para el perro como para la persona que le está lavando.
El Grupo SPRI es uno de los agentes que ponen en marcha la estrategia RIS 3 Euskadi para impulsar la especialización inteligente en los ámbitos de la energía, la fabricación avanzada, la biosalud y la nanociencia.
Para pymes, para diversificar mercados, becas en el extranjero, licitaciones internacionales, subvenciones a fondo perdido para afianzar la exportación, ayudas para implantaciones o formación específica en internacionalización.
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