La empresa vasca, ubicada en BIC Bizkaia, se enfoca al descubrimiento de nuevos fármacos
TAD, siglas de The Art of Discovery, es una startup científico-tecnológica dirigida a la investigación en nuevas medicinas mediante la experimentación con ratones inmunodeficientes y el uso de inteligencia artificial. “Nuestro objetivo es encontrar nuevos fármacos que permitan frenar las enfermedades con alto impacto global y, en especial, el envejecimiento”, explica Iñigo Angulo Barturen, cofundador y CEO de TAD.
La empresa se fundó en 2016, junto a la doctora en Biología María Belén Jiménez-Díaz y el abogado Joseba Fernández. Durante estos casi tres años de actividad han constituido un equipo experto en investigación farmacéutica mediante sistemas de ratones humanizados, así como un laboratorio de experimentación ubicado en el Parque Científico Tecnológico de Bizkaia.
Actualmente, realizan evaluaciones de medicinas en estadios preclínicos para farmacéuticas a nivel internacional, evaluando la eficacia de nuevos fármacos, lo que representa la principal línea de financiación de la compañía. Además, el equipo de TAD cuenta con más de 10 años de experiencia en la investigación en malaria, y han trasladado este conocimiento a investigaciones para avanzar hacia nuevos tratamientos. En este sentido, la empresa colabora con Medicines for Malaria Venture, una institución sin ánimo de lucro, para el desarrollo de medicamentos antimaláricos asequibles. “Proporcionamos las herramientas para que esta organización pruebe los fármacos antes de realizar los estudios en humanos”, explica Iñigo Angulo, “somos uno de los pocos centros a nivel mundial que pueden realizar este tipo de evaluaciones”.
De cara a 2020, la empresa ha iniciado una nueva línea de investigación centrada en nuevos fármacos capaces de combatir el envejecimiento humano. “En una primera fase, utilizaremos la información masiva disponible en bases de datos científicas y la inteligencia artificial para determinar tratamientos potencialmente útiles contra el envejecimiento”, explica el doctor en Biología y experto en Inmunología, que cuenta con 17 años de experiencia previa en la industria farmacéutica, “a partir de ahí, comenzaremos la investigación en ratones humanizados para evaluar su potencial uso como nuevos fármacos que permitan revertir el envejecimiento de los tejidos humanos”.
Tal y como explica Angulo, “desde un punto de vista puramente científico, los datos demuestran que la longevidad es algo manipulable genéticamente y ya existen resultados en biología celular que muestran la posibilidad de reprogramar las células”. Un contexto teórico, que, según el equipo de investigadores de TAD, “permite considerar el envejecimiento como una enfermedad en sí misma y que nos lleva a hacer una apuesta decidida por esta aproximación”.
Para su puesta en funcionamiento y apertura al mercado internacional, la empresa ha contado con el apoyo de Beaz y con el Gobierno Vasco, y este año han recibido el premio ON Bizkaia 2019 en la categoría de Proyecto de Creación de Empresas.
Para pymes, para diversificar mercados, becas en el extranjero, licitaciones internacionales, subvenciones a fondo perdido para afianzar la exportación, ayudas para implantaciones o formación específica en internacionalización.
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