Korta es una empresa familiar fundada hace 40 años y ubicada en Zumaia (Guipúzcoa). Especializada desde sus inicios en la fabricación de husillos a bolas y ocupando un lugar importante en sectores como el de la máquina-herramienta, energía, automoción o aeronáutica.
Dentro de uno de los primeros proyectos aeronáuticos en Korta, surgió la necesidad de certificar el proceso de rectificado en el 100% de las piezas. Durante la búsqueda de las distintas alternativas a los procesos de ataques químicos, se localizó la tecnología del ruido magnético de Barkhausen, lo que permitió implementar técnicas de mantenimiento predictivo. Esta tecnología hace posible corregir y reducir el número de piezas defectuosas.
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Surge la necesida de certificar al cien por cien la ausencia de quemas de rectificado y capa de dureza del husillo. Se desarrollaron sensores específicos para medir el ruido magnético Barhauser, relacionado con la microestructura y dureza del material. Una vez rectificadas las piezas, se llevan al banco de BNA, desarrollado para este proyecto, para hacer un barrido de todo el husillo, midiendo el ruido magnético. Con estas señales se pueden detectar problemas de dureza o quemas en el husillo. El análisis de la tendencia de datos permite anticiparse a posibles problemas, rechazar piezas defectuosas y entregar el cien por cien de piezas certificadas
Aeronáutica
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