Tres conceptos resumen la actividad de PlayerOn: deporte, emprendimiento y engagement. El resultado es una plataforma de fan engagement que ofrece soluciones interactivas a las marcas para mejorar el vínculo con sus clientes a través juegos altamente personalizables y para todos los públicos. De momento, y prácticamente acaba de empezar, ya trabajan creando nuevas experiencias para clubes como la Real Sociedad de fútbol y acaban de cerrar un acuerdo con una conocida cadena de cines el reciente estreno de la película Batman, avanza su la CEO y co-fundadora de esta start up alavesa, Maitane López de Foronda.
¿A qué se dedica exactamente PlayerON?
Somos una plataforma de gamificación para empresas. El objetivo es unir engagement (conexión positiva con sus clientes) y captación de datos de una forma lúdica, lo que nosotros llamamos la «gamificación del dato». Ofrecemos la posibilidad de configurar juegos completamente personalizados para que los compartan con sus seguidores en redes sociales, visitantes de su web o tienda online, usuarios de su aplicación oficial…
¿Qué os diferencia de la competencia?
Aportamos tres novedades respecto a nuestros competidores: en primer lugar podemos conectar, a través del juego, el móvil del jugador con una segunda pantalla (un videomarcador, una pantalla gigante o un televisor) y crear nuevas experiencias que sorprendan al usuario. En segundo lugar podemos crear juegos en base a campos de la base de datos. Es lo que llamamos «la gamificación del dato», esto es, que compita una grada contra el resto de gradas, o hombres contra mujeres o los dueños de mascotas versus los que no las tienen. Y en tercer lugar tenemos equipo de desarrollo y creativo propio, por lo que podemos desarrollar juegos ad hoc e incluso ocuparnos de todo el proceso (diseño de la campaña, activación e informe final).
“Mejorar la experiencia de los Fans en un estadio de fútbol, de basket o en un concierto…”. ¿De qué estamos hablando?
Estamos hablando de darle una vuelta a lo que sucede cuando acudes a un evento. A que convirtamos a los asistentes también en protagonistas del mismo, no sólo en testigos. Que puedan interactuar con las pantallas gigantes, que se diviertan y, por tanto, que sea un recuerdo memorable. Esto ayuda a diferentes áreas de negocio estratégicas: marketing, ticketing, patrocinio, dinamización del partido en caso de un equipo deportivo, ventas de restauración y merchandising. Es el punto de unión entre ambos lados: los asistentes se lo pasan bien y ganan premios, y la marca o equipo cumple diferentes objetivos estratégicos.
Es la gamificación y los datos…
Eso es. Las marcas necesitan captar datos personales de sus clientes y potenciales clientes para
dirigirse directamente a ellos, personalizar sus comunicaciones y, en definitiva, conseguir una
venta. En un momento en la que Google ha anunciado que dejará de permitir cookies de terceros
en su navegador, las marcas están abocadas a conseguir atraer directamente a los usuarios a sus
canales y captar un dato de contacto que explotar después con marketing directo.
¿Por qué surge esta empresa, en qué contexto?
Surge de la experiencia y la oportunidad. Trabajé durante muchos años en distintas agencias de medios y estrategia digital antes de desarrollarme durante cinco años en el Grupo Baskonia-Alavés. Mi objetivo en el área digital del Grupo era dar respuesta a las inquietudes del resto de departamentos (marketing, ticketing, patrocinio, merchandising…), por lo que tenía una visión completa de lo que ocurría. Concluimos que incorporar gamificación en un contexto de pandemia mundial podría ser una buena opción para dar respuesta a las diferentes áreas de negocio. Probé diferentes proveedores y vi sus limitaciones y carencias, se me ocurrían nuevas posibilidades que estos no atacaban sobre todo pensando en la captación del dato. Así, de una necesidad de mercado surgió PlayerON.
El papel de BIC Araba y Grupo SPRI…
Cuando nos empezamos a plantear poner en marcha la empresa, lo primero que hicimos fue
buscar asesoramiento. Visitamos BIC Araba y nos asesoraron muy bien. Después, accedimos al
programa Ekintzaile para emprendedores (aprovecho para dar las gracias a Diego por su ayuda
para prepararlo) y, ahora que vamos a cumplir un año desde nuestro nacimiento, no podemos
estar más contentos con su acompañamiento. Mis socios son de Madrid y están asombrados con la
ayuda que se brinda desde las instituciones públicas vascas a las startups.
¿PlayerON solo está enfocada en el ámbito del deporte?
No, de hecho te diría que la gamificación puede aplicarse a cualquier ámbito de actividad. Aún así,
nuestro principal foco está en sectores que reúnan a una gran audiencia, especialmente si ésta
está esperando a que ocurra algo. Hablamos, además de deporte profesional, de organizadores de
eventos (conciertos, congresos, presentaciones…), salas de cines o medios de comunicación que
eseen potenciar sus aplicaciones oficiales e interactuar con su audiencia en directo. También de
restauración, retail y marcas de gran consumo (podemos hacer que interactúen con el packaging y
el punto de venta). De hecho, hemos trabajado ya con equipos de fútbol y baloncesto, congresos y
ferias, un recinto de eventos y unas salas de cine. Lo bueno es que, como decía, nuestra
plataforma ofrece un catálogo de juegos altamente personalizable por lo que el juego que
publiquen dos empresas distintas, aunque sea del mismo tipo, no parecerá el mismo.
Desde un punto de vista de club deportivo o un concierto, ¿qué rentabilidad obtienen o buscan?
Pueden tener diferentes motivaciones en su estrategia. Desde el puro entretenimiento para su
público, hasta crear un nuevo activo publicitario (pueden buscar un patrocinador para el juego), la
captación de datos o incluso potenciar ventas directas a través de los premios (descuentos para
compras en caliente, aumento del ticket en restauración…
Para pymes, para diversificar mercados, becas en el extranjero, licitaciones internacionales, subvenciones a fondo perdido para afianzar la exportación, ayudas para implantaciones o formación específica en internacionalización.
Te interesa ¿verdad?