La compañía bilbaína ofrece soluciones completas para la captación de datos de máquinas
Las empresas industriales cada vez están más interesadas en soluciones integrales para la captación de datos de sus procesos y productos que incluyan la instalación de sensores, conectividad IoT, almacenamiento ‘cloud’, tratamiento de datos mediante inteligencia artificial e interfaces gráficas de visualización. Ese es el nicho de negocio de la vizcaína D&A Innovative Systems, nacida en 2015 y con el objetivo a corto plazo de duplicar facturación y plantilla. Hablamos de servitización y datos vinculados con máquinas con Alberto Blázquez, Product Manager de D&A Innovative Systems.
¿A que os dedicáis en D&A Innovative Systems?
Somos una empresa que intentamos facilitar herramientas para permitir a nuestros clientes dar sus primeros pasos en la Industria 4.0 facilitándoles sensórica para que puedan digitalizar sus máquinas y así consigan predecir averías, optimizar la producción u ofrecer servicios a sus clientes realizando un seguimiento del funcionamiento de máquinas, es decir, servitizando máquinas.
¿Nos puedes poner algún ejemplo de este tipo de soluciones?
Trabajamos con empresas manufactureras o del sector siderometalúrgico y lo que les ofrecemos es poder recoger información de diferentes tipos de máquinas que, bien por ser viejas o por ser demasiado nuevas, no tienen un sistema fácil para poder recoger información sobre lo que hacen. Se trata de traducir el dato de estas máquinas a un lenguaje comprensible para controlar o saber dónde podremos tener problemas en la producción o si la alimentación o la presión son correctas. Gracias a este tipo de información podemos llevar a cabo mantenimientos predictivos y proactivos que son vitales para que las máquinas no se paren y provoquen pérdidas.
Otro ejemplo de soluciones que desarrollamos están orientadas a clientes fabricantes de maquinaria o aparamenta empleada en máquinas. Les ofrecemos sensores para que, de una manera sencilla, puedan saber qué hacen sus productos gracias a esta captación de datos.
¿Qué tipo de tecnologías implementáis en vuestros desarrollos?
Inicialmente estábamos enfocados a aportar soluciones IoT para nuestras plataformas, como pueden ser sensores. Con el paso del tiempo, los clientes nos decían que en vez de trabajar con dos o tres empresas para un mismo proyecto, querían una solución integral y eso nos llevó a ofrecer un servicio completo. Por una parte, desarrollamos sensores que recogen la información, solventamos los problemas de comunicación con servicios en la nube, implementamos algoritmos que nos permiten predecir situaciones y creamos interfaces gráficas en las que el cliente puede ver la información que recogemos y analizamos.
Imagino que estos desarrollos también están acompañados de una labor de consultoría, ¿verdad?
Sí, por supuesto. Por ejemplo, trabajamos con una empresa dedicada a la fundición de metal que quiere saber cómo se puede mejorar y ahorrar en el consumo energético de los hornos. Nosotros analizamos qué tipo de sensores son los más adecuados para cada horno, qué datos son los relevantes y cómo combinar esos datos para ofrecer al cliente las soluciones más adecuadas para ahorrar en consumo energético.
Una de las claves de vuestros servicios se basa en la servitización, es decir, en encontrar nuevos modelos de negocio para los clientes basados en los datos que generan sus productos. ¿Es sencillo encontrar modelos de servitización?
Es relativamente sencillo encontrar claves de servitización. Es bastante más complejo entregárselo al cliente de manera sencilla ya que supone cambiar el modelo de negocio de la empresa. También es cierto que alrededor de este paradigma de la servitización hay mucha competencia: desde multinacionales, ingenierías, empresas más pequeñas o centros tecnológicos.
Supongo que la confidencialidad del dato captado y tratado también es un reto que tenéis que afrontar.
Tenemos varios acuerdos de confidencialidad firmados porque se ha inculcado que el dato tiene mucho valor y existe cierto recelo a que cualquier persona tenga acceso al dato. Incluso nuestra idea inicial de cómo teníamos entendido nuestro negocio ha variado por ello. Creíamos que el análisis de datos iba a ser un servicio nuestro ofrecido a las empresas, pero, finalmente, nos hemos tenido que convertir en un ‘partner’ tecnológico de nuestros clientes para poder ofrecerle ese análisis de datos. Hay mucho miedo a que los datos salgan de las empresas y hasta que esto no sea algo más común seguirá existiendo ese miedo.
¿Por dónde pasan vuestros retos de futuro?
Fundamentalmente, pasan por poder cumplir nuestro plan de negocio, bastante ambicioso en cuanto a crecimiento y aumento de la plantilla. Nos gustaría poder ampliar nuestro ámbito de trabajo a nivel estatal y llegar a trasladar a los clientes las bondades de las tecnologías que empleamos. Ahora mismo estamos centrados en Euskadi, Navarra, La Rioja y Cantabria. Hay una cosa que juega a nuestro favor que es que en Euskadi hay un gran entramado industrial y contamos con muchos clientes. Eso ha hecho que en estos años estemos priorizando nuestro entorno.
Con todo, en año y medio queremos llegar a 12 personas, duplicando la plantilla. Estamos buscando perfiles profesionales relacionados con IoT, sistemas de comunicación o Big Data, pero es bastante complicado porque todas las empresas están buscando los mismos perfiles. Esta escasez de personal cualificado hace que no podamos abordar todos los proyectos que querríamos.
Para pymes, para diversificar mercados, becas en el extranjero, licitaciones internacionales, subvenciones a fondo perdido para afianzar la exportación, ayudas para implantaciones o formación específica en internacionalización.
Te interesa ¿verdad?