Unir escenarios profesionales como el de la fisioterapia y la Inteligencia Artificial es poner el foco en Euskadi en la empresa Trak Health Solutions, impulsada en plena pandemia por tres socios que se conocían de la universidad y que desarrollaron una aplicación para mejorar los procesos de rehabilitación de las lesiones sin tener que salir de casa. Desde entonces, esa plataforma no ha dejado de crecer. La empresa alcanza en estos momentos las 16 personas y acaba de cerrar su segunda ronda de inversión por valor de 1,3 millones de euros, un empujón con el que confían en poder iniciar su proceso de internacionalización, reconoce Carlos Rodríguez, uno de los fundadores junto a Jon Vital y Daniel Soler.
¿Cómo van las cosas?
Realmente bien, muy contentos. Actualmente estamos trabajando con entidades referentes sanitarias como Mapfre, Sanitas o Mutua Universal. Ya hemos pasado de una fase de realizar pilotos a desplegar nuestra solución a escala nacional en varios centros médicos y rehabilitación. Es muy gratificante trabajar en este sector, ya que semanalmente estamos realizando 2.000 sesiones de fisioterapia digital que están ayudando a la recuperación de varias personas y este dato aumenta semanalmente.
¿Cómo podríamos definir Trak?
Se trata una herramienta digital que permite a los profesionales sanitarios ofrecer tratamientos de rehabilitación de forma instantánea sobre los ejercicios practicados a sus pacientes, así como reportar datos clínicos al profesional sanitario para su posterior análisis. Esta plataforma ayuda además a reducir los tiempos en las listas de espera.
Acaban de cerrar su segunda RI por valor de 1,3 millones de euros. ¿Cuál es el objetivo?
Con esta ampliación de capital queremos escalar el negocio para consolidarnos como plataforma líder en fisioterapia digital a nivel nacional y después dar un salto internacional. La idea es abrir mercado en Holanda apoyado por un proyecto europeo y después Colombia, Chile y México a partir de verano.
Ese apoyo europeo está relacionado con la obtención del producto sanitario de clase 2…
La obtención de este producto nos permitirá comercializar un producto aún más competitivo y en ese sentido, los fondos van a ir destinados a aumentar la escalabilidad de la empresa en sus áreas de producto, ventas y regulación. Además, como decía, hemos sido una de las dos empresas europeas beneficiadas de una subvención promovida por EIT Health para introducir la solución en el sistema de reembolso de salud de los Países Bajos, un mercado muy acostumbrado a las soluciones de salud digital.
¿Qué aporta la Inteligencia Artificial a su plataforma?
La IA acompaña al paciente en el proceso de rehabilitación ofreciendo correcciones sobre los ejercicios que tiene que realizar y recolecta datos para que el profesional sanitario pueda monitorizar el progreso de recuperación.
¿Cómo aborda una pyme como la suya la parte de la Regulación Sanitaria?
El sector sanitario es lento para una startup, ya que hay que dar pasos firmes en cuanto a generar evidencia clínica de la solución y cumplimentar todas las cuestiones regulatorias. Estamos rodeados de expertos que nos han ayudado con toda la regulación y a mediados de este año conseguiremos el marcado CE como producto sanitario clase 2.
Como buena tecnológica se consideran una empresa nómada donde el teletrabajo está a la orden del día…
La empresa nació en plena pandemia y desde el primer día nos acostumbramos a un modelo de trabajo digital. Nuestros activos como empresa son un software y algoritmos de inteligencia artificial que son activos digitales, lo cual nos permite tener un equipo descentralizado que a día de hoy se encuentra esparcido por toda España. Baste decir en este sentido que nos ponemos cara cada tres o cuatro meses.
Para pymes, para diversificar mercados, becas en el extranjero, licitaciones internacionales, subvenciones a fondo perdido para afianzar la exportación, ayudas para implantaciones o formación específica en internacionalización.
Te interesa ¿verdad?