La elevada exigencia de calidad en el sector aeronáutico, el prolongado ciclo de vida de las piezas que se utilizan en él (de entre 30 y 40 años) y los elevados costes ligados a retornos de la inversión a largo plazo obligan a la industria de este ámbito en Euskadi a una permanente investigación e innovación en los procesos para fabricar componentes. Es el caso de WEC, empresa perteneciente al grupo industrial Velatia, y el CFAA (Centro de Fabricación Avanzada Aeronáutica) de la UPV/EHU, que colaboran en el proyecto Rotoseal, una iniciativa para incorporar nuevas metodologías a la fabricación aeronáutica, entre ellas la fabricación aditiva.
Con el objetivo de desarrollar toda una “nueva generación” de piezas para el sellado dinámico de turbinas de motores aeronáuticos, ambas organizaciones trabajan en la creación de componentes con los últimos desarrollos tecnológicos basados en soldadura avanzada –para todo el proceso, incluyendo sistemas de amarre y diseño de electrodos– y electroerosión de precisión –por penetración y por hilo–.
La apuesta busca una “mejora radical del proceso de fabricación convencional de segmentos, para que siga siendo claramente competitivo, incluso en comparación con las novedosas tecnologías de aporte que se están desarrollando en los últimos años”, indican desde el proyecto.
Rotoseal quiere mejorar los pasos que se dan en la fabricación de estos componentes para conseguir un “proceso productivo sin riesgos, tanto técnicos y tecnológicos como económicos”, indican sus responsables. Entre las mejoras, identifican como “clave la depuración de procesos de soldadura y acabado de precisión” para minimizar defectos. Además de mejorar la competitividad en el proceso y de ampliar las capacidades tecnológicas, Rotoseal es también una apuesta por el desarrollo de nuevos productos.
Enmarcado dentro del programa Hazitek 2019 y cofinanciado por el Gobierno Vasco y la Unión Europea a través del fondo europeo de desarrollo regional 2014-2020 (FEDER), Rotoseal encara ahora sus últimos meses, después de haber arrancado en 2019 con el análisis tecnológico en esta materia para identificar oportunidades y una segunda fase de desarrollo de prototipos con dichas tecnologías. La tercera fase está centrada en completar el prototipo, con su integración y validación para su industrialización.
El Grupo SPRI impulsa la I+D de las empresas vascas con herramientas, activos, ayudas, grupos de trabajo y alianzas con el fin de potenciar la investigación y generar nuevas tecnologías, con programas como Elkartek, Emaitek o Hazitek, cuya información puedes obtener aquí.
Para pymes, para diversificar mercados, becas en el extranjero, licitaciones internacionales, subvenciones a fondo perdido para afianzar la exportación, ayudas para implantaciones o formación específica en internacionalización.
Te interesa ¿verdad?